¿QUÉ ES UN IMPLANTE DENTAL?

El implante dental es una raíz artificial de titanio que se inserta en el hueso maxilar superior o inferior uniéndose a él, actuando como soporte para las prótesis sobre implantes que realizaran la función de dientes artificiales de remplazo. El implante dental es totalmente biocompatible con el organismo.

El implante dental se coloca mediante una intervención quirúrgica simple e indolora que permite la reposición en forma natural de piezas dentarias ausentes o en mal estado.

La intervención de un implante simple no es un proceso largo, y ese mismo día se medica al paciente con antibióticos y analgésicos para evitar molestias post-operatorias.

PROCEDIMIENTO A SEGUIR

Cuando se acude a una clínica por primera vez para hablar de la realización de un tratamiento de implantes, se lleva a cabo una historia clínica con una completa exploración de la boca, incluyendo diversas pruebas de imagen (radiografías, TAC, escáner…). Posteriormente se harán modelos de escayola de estudio. Con toda esa información se planifica la cirugía mediante un programa informático que permite hacer un diagnóstico muy aproximado del caso y una simulación digital de la intervención quirúrgica a realizar. Asimismo, el especialista valorará la necesidad de hacer pruebas complementarias (ej. estudio analítico preoperatorio, índice de IRN, nivel de glucemia).

Para mejorar la cicatrización de los tejidos blandos (encías) y la formación de hueso alrededor de los implantes, así como en los defectos óseos que pueda haber en los maxilares, se emplea el plasma rico en factores de crecimiento.

Primera fase quirúrgica

En esta primera intervención se colocarán los implantes dentro del hueso (maxilar o mandíbula). Una vez colocados, los implantes quedarán enterrados en el hueso esperando el tiempo necesario para la oseointegración (aproximadamente 3 meses para la mandíbula y 4-5 meses para el maxilar superior) y cubiertos por la encía.

En casos de reabsorción o pérdida extrema de hueso esta primera fase quirúrgica puede dividirse en dos sub-fases, siendo la primera para la colocación de injertos de hueso o implantes expansores de cresta que nos permitan reganar parte del hueso perdido, y la segunda para la colocación de los implantes que constituirán la base de la futura rehabilitación protésica.

El post-operatorio no es doloroso. Al día siguiente se levantará con la cara y zona levemente inflamada y quizás con un hematoma (durante 7-10 días).

Durante esta fase es importante:

Tomar la medicación prescrita por el cirujano.
Poner hielo o pack de gel frío en la zona afectada por la parte externa de la cara.
Dieta líquida o blanda según indique especialista (tortillas, purés, etc.). En ningún caso se deben comer bocadillos o frutos secos.
No presionar con la lengua la zona intervenida.
No fumar ni tomar bebidas alcohólicas.
No se aconseja hacer deporte esos días, especialmente de contacto o impacto.
Segunda fase quirúrgica.

En un periodo aproximado de 3 a 4 meses (que variará en función de la localización del implante y el tipo de hueso sobre el que asienta) podremos comenzar la segunda fase quirúrgica. Esta intervención es mínima y consiste en hacer un pequeño ojal en la encía para conectar los implantes que se encuentran dentro del hueso con la cavidad oral. Para realizar esta conexión atornillamos al implante un aditamento de titanio que se denomina pilar de cicatrización o transepitelial, que es un paso intermedio para poder colocar la prótesis definitiva o corona.

Esta intervención requiere solo anestesia local y en ocasiones será necesario dar unos puntos de sutura. La duración suele ser de menos de 1 hora, dependiendo del número de implantes. Se tomará una radiografía y en algunos casos una medida para confeccionar la prótesis provisional.

Transcurridos aproximadamente 15-20 días desde la colocación de los pilares de cicatrización podremos colocar la prótesis provisional sobre los implantes. El procedimiento es sencillo y consiste básicamente en sustituir el pilar de cicatrización por la corona o prótesis (dientes provisionales) . Esta fase normalmente no requiere anestesia.

Carga Inmediata (dientes en el mismo día)

En algunas ocasiones, durante el estudio del caso, podemos encontrarnos un hueso de muy buena calidad que permite que los implantes que coloquemos durante la cirugía queden bien anclados en el mismo. En estos casos, se podrá colocar una prótesis provisional sobre los implantes de forma inmediata o unas pocas horas o pocos días después de la intervención. Esta prótesis, le proporcionará una estética correcta con una dentadura provisional durante los meses en los que se están oseointegrando los implantes y con algunas limitaciones funcionales, ya que durante este período deberá seguir una dieta blanda y no comer alimentos duros o que deban ser cortados con los dientes (frutos secos, bocadillos, carnes rojas, etc.).

Una vez terminado el tratamiento es fundamental que el paciente siga una serie de pautas que repercutirán directamente en lo duradero del mismo:

  • Un correcto cepillado diario de los dientes tras cada comida.
  • Utilización del hilo o seda dental y cepillos interproximales..
  • No fumar.
  • Asistir a las citas programadas de control periódico.

Es necesario que cada paciente disponga de su cartilla de mantenimiento con los datos técnicos del tipo de prótesis que lleva y la fecha de su última visita y próxima revisión.