Se dedica al diagnóstico y tratamiento de las enfermedades, traumatismos, defectos de las piezas dentarias, de los maxilares y de los tejidos blandos adyacentes que requieran intervención quirúrgica.
El cirujano oral debe tener profundos conocimientos de ciencias básicas para su profesión como la anatomía, la histología y la fisiología, así como de las entidades nosológicas más frecuentes.
Además de su capacitación, entrenamiento quirúrgico y obviamente una gran destreza manual, es indispensable que el profesional posea madurez de pensamiento y un gran respeto por los tejidos vivos.